Despedida.

Llegó la hora. Parece que fue ayer cuando íbamos a la primera clase de Didáctica con el miedo de cómo sería la profe y cómo sería la asignatura, entre otras cosas.
Creo que ambas cosas nos han ido sorprendiendo a lo largo del cuatrimestre.
El método de enseñanza de Almudena nos ha servido para estar constantemente interesándonos por la asignatura, ya que todos los días nos sorprendía con algo. Esa clase en el césped, esas películas en las EPD y esas formas diferentes de dar las clases no solo me ha servido para entender los conceptos, reflejarlos en el blog y olvidarlos, sino que es un proceso continuo de aprendizaje en el que vas enlazando los distintos conceptos, vas entendiendo la importancia de éstos para la vida real y te hace reflexionar e imaginarnos a nosotros dentro de 5 años manejando estos términos.

Pues sí, aunque quizás no haya conseguido reflejarlo del todo en el blog en el transcurso del cuatrimestre, como he dicho, no solo me ha servido para tomar apuntes y utilizar éstos para escribir aquí, sino que va mucho más allá.
Cuando empezamos las clases, no tenía ni la más remota idea de lo que era Didáctica, en cambio, ahora, si alguien me preguntara sabría contestarle según mi modo de verla y según como yo la he entendido. Algo que nos quedó claro desde el primer momento fue que DIDÁCTICA ESTÁ EN TODAS PARTES y, poco a poco, nos hemos ido dado cuenta de ello. En cualquier momento, en cualquier lugar y con todo tipo de personas está la Didáctica.
Los conocimientos adquiridos a lo largo de estos meses, y no solo me refiero a los contenidos teóricos, me sirven para desenvolverme mucho mejor en la vida diaria y me han abierto la mente.

Todavía me acuerdo el momento en el que Almudena nos dijo que no habría examen. No sabía si alegrarme o asustarme. Al final creo que me decidí por lo segundo. “Si no hay examen significa que nos esperan unos meses muy duros” pensaba yo… y bueno, tanto el blog como el proyecto han necesitado un trabajo constante y continuo, pero ha sido llevadero. Además, creo que el hecho de que no hubiera examen nos beneficiaba. Tenemos la costumbre de aprendernos las cosas de memoria y “vomitarlas” en el examen y, si esto ocurriera con esta asignatura, quizás no hubiéramos aprendido tanto como lo hemos hecho.
El trabajo constante que ha necesitado la asignatura nos ha servido para afianzar conceptos y conocimientos, y, lo más importante, saber transferirlos a la vida cotidiana.

En cuanto a las clases, como he comentado antes, eran siempre “sorpresa”. Llegabas a clase deseando empezar y quitarte esa curiosidad de: ¿con qué nos sorprenderá hoy Almudena? Cada clase era una manera de evadirnos de esas preocupaciones e inquietudes por otras asignaturas y solo interesarnos por el “mundo didáctico de Almudena”, que, por cierto, es bastante interesante. Qué pena que el cuatrimestre se acabe ahora que estábamos disfrutando…
En definitiva, que me ha gustado mucho la forma de enseñar de Almudena, la cual nos ha enseñado de verdad, ya que hay otros profes que con sus métodos de enseñanza-aprendizaje hacen cualquier otra cosa menos enseñar…

He de comentar que el proyecto fue un gran reto para nosotros. La mayoría no nos habíamos enfrentado nunca a uno por lo que, al principio, veíamos dificultades por todas partes. A medida que íbamos avanzando nos dimos cuenta de que solo teníamos que aplicar lo explicado en clase, pero claro, aun así no sabíamos por donde cogerlo. Necesitamos varias quedadas y trabajo individual para que el proyecto fuese cogiendo forma. Una vez conseguido lo más difícil, que era empezar, todo lo demás iba saliendo solo. Bueno, solo no… con mucho trabajo constante, muchos agobios y muchas horas en la galería de la UPO, pero creo que todo esto ha merecido la pena. Hemos terminado contentos sobre el trabajo realizado por todos, por la unión de grupo y por cómo ha quedado el proyecto, ahora solo falta saber qué le parece a Almudena…
Pienso que no solo ha servido para aplicar los conocimientos aprendidos en clase a un contexto real, sino que también para ir aprendiendo poco a poco a trabajar en grupo y todo lo que ello conlleva.

Por último, felicitar y agradecer a Almudena por la labor realizada con todos nosotros, por todo el tiempo que nos dedica (que no es poco) y por todo lo que no has enseñado a lo largo de estos meses, que como ya he dicho, a lo mejor no me he expresado tan bien en el blog como yo quería, pero reitero que esta asignatura me ha servido para muchísimo.

Me despido con este magnífico video, con el que debemos sentir la necesidad de seguir luchando por nuestros sueños y disfrutar de lo bonita que es la vida. 

La evaluación

¿Qué es la evaluación educativa?

Según Cabrera (1987) es “el proceso sistemático de obtener información para describir, sea algún elemento, sea el proceso, sean los resultados educativos, con objeto de emitir un juicio sobre los mismos, según su adecuación a unos criterios previamente establecidos, y todos ellos en orden a servir de base para una eventual decisión educativa” 

Varios autores como Castaño, Moreno, Moreno y Hernández (1989) consideran que existe cierta confusión a la hora de establecer un concepto claro de “evaluación”, ya que éste es confundido, a veces, por otros conceptos como “medición” y “calificación”.
Por eso hacen una distinción clara:



Para medir, no es necesario emitir juicios de valor, en cambio, para evaluar sí.
Como la evaluación significa emitir un juicio de valor, ésta es un hecho subjetivo, aunque es importante hacerlo con criterio, el cual siempre es propio de cada persona ya que NO EXISTEN VERDADES ABSOLUTAS.

EVALUACIÓN ES:

EVALUACIÓN NO ES:

ES un proceso continuo, progresivo y sistemático de perfeccionamiento de la tarea formativa. ES global e integral, ya que se orienta hacia todos los elementos que componen el proceso de enseñanza aprendizaje. (Alumnado, formadores, proceso formativo, materiales, etc.) ES un instrumento crítico, ya que permite verificar el funcionamiento del proceso formativo, comparando los resultados, con lo planificado inicialmente. (Registrar los errores, descubrir las causas, e intentar corregir lo que sea necesario para que el proceso de formación mejore y apunte a la excelencia)

NO es una acción puntual, realizada en un momento concreto del proceso formativo. NO es Calificación, porque calificar se identifica con valorar el rendimiento del alumnado. (Ej. Nota obtenida en un examen) NO es Medir, porque medir es comparar algo con una unidad que utilizamos como patrón. (Ej. Coeficiente de Inteligencia de un alumno/a comparándolo con la media para su edad)

FUNCIONES DE LA EVALUACIÓN:

- Diagnóstico: tiene una función preventiva. El programa se acomoda al conjunto de características personales del alumnado.

- Orientación: existe una continuidad en la recogida de información y se detectan los errores que se producen en el proceso de enseñanza-aprendizaje (mejora del aprendizaje). La planificación debe estar totalmente ajustada y se deben corregir los efectos no planeados (mejora del programa).

- Motivación: el alumno estará motivado si es capaz de reconocer sus avances y dificultades.

- Control-Calificación: calificación final que certifica si el alumno está capacitado o no en determinados aprendizajes.

- Acreditación-Certificación: esta función está relacionada con la anterior.


La evaluación es un proceso que las personas hacemos de forma natural y que hacemos constantemente. Para formalizar este proceso, se ha diseñado un plan de evaluación que se caracteriza por:
- ¿Cuándo?: se refiere al momento en el que se lleva a cabo la evaluación.
- ¿Con qué?, es decir, qué técnicas e instrumentos se utilizan para evaluar.
- ¿Qué?, es decir, cuál es el objeto de evaluación, cuál es el elemento que vamos a evaluar.
- ¿Quiénes?, qué personas van a llevar a cabo la evaluación.
- ¿Para quién?, a quién va dirigida la evaluación.
- ¿En función de qué?, o sea, qué criterios se van a utilizar.
- ¿Cómo?, se refiere a la metodología que se llevará a cabo.

La finalidad de la evaluación debe ser proporcionar a los propios alumnos y a los formadores, información sobre qué objetivos se han conseguido, qué contenidos se han interiorizado, qué estrategias han sido más eficaces… permitiendo, de este modo, la optimización del próximo diseño curricular.

El objeto de la evaluación se clasifica en 3: personas, proceso y resultado.

Además, el proceso de evaluación se divide en distintas fases, respecto al momento del tiempo en que se realice y el objetivo o finalidad:




1. Inicial o diagnóstica: esta evaluación inicial se suele aplicar antes de comenzar la acción formativa, o al principio de cada unidad de contenido.
Con esta evaluación, se alcanza un mayor conocimiento del alumnado, y a partir de ahí se fijan las estrategias educativas y los objetivos.

2. Procesual o formativa: se evalúan todos los elementos que forman parte del proceso educativo, detectando los puntos fuertes y débiles que presenta el proceso de formación. Su objetivo es optimizar todo lo posible el proceso de enseñanza-aprendizaje. Una de las características que presenta es que se pueden llevar a cabo correcciones y ajustes sobre el proceso educativo.

3. Final o sumativa: su objetivo es verificar la eficacia del proceso de formación. Sirve para decidir la certificación o no del título que expresa la finalización exitosa del proceso educativo, es decir, evaluar al alumno entre el aprobado o suspenso, por lo que es evidente que se producirá al final del proceso.

4. Demorada: casi nunca se lleva a cabo. Se trata de, una finalizado el proceso educativo, una vez pasado un tiempo (días, meses…), observar y analizar si los objetivos que se querían conseguir y que se consiguieron, siguen en pie.


Por último, existen multitud de instrumentos que se utilizan para el plan de evaluación. Éstos son varios de los que se usan a menudo:

“Evaluar no es controlar, es mejorar”

Planificación didáctica y diseño curricular.

Hoy vamos a hablar de la planificación didáctica. Quizás es un tema menos interesante, pero es necesario tener claro diferentes aspectos que pueden ser importantes.

Para empezar, diferenciaremos los 3 niveles de planificación que existen: plan, programa y proyecto, ya que estos conceptos pueden traer dudas en cuanto a diferencias y semejanzas.

- PLAN: El plan define a grandes rasgos las ideas que van a orientar y condicionar el resto de niveles de la planificación para el mismo. Determina prioridades y criterios, cobertura de equipamientos y disposición de recursos, su previsión presupuestaria y horizonte temporal.

Sería el nivel estratégico, con unas metas genéricas que dan sentido al resto de los niveles, de forma que no se hagan actuaciones aisladas sino que todas tengan una coherencia, una finalidad.

- PROGRAMA: El programa concreta los objetivos y los temas que se exponen en el plan, teniendo como marco un tiempo más reducido. Ordena los recursos disponibles en torno a las acciones y objetivos que mejor contribuyan a la consecución de las estrategias marcadas. Señala prioridades de intervención en ese momento.

Sería el nivel táctico, situado entre el plan y el proyecto. Intenta acercar uno al otro concretando esas ideas y objetivos más generales del plan en un lugar y tiempo determinados y a partir de unos recursos concretos disponibles. De esta forma las ideas generales del Plan se llevan a una situación concreta.

Un PROGRAMA DE EDUCACIÓN SOCIAL se caracteriza por ser un conjunto de actividades destinadas a satisfacer necesidades o resolver problemas vinculados con la integración o cohesión social.
El programa de Educación Social surge tras haber una necesidad o problema. Puede ser derivada del entorno social, de algún conflicto personal, de un colectivo en riesgo de exclusión… Se trabaja a través de la organización de un equipo profesional.
Hay que tener en cuenta que la desadaptación no es igual para todas las personas, por lo que los profesionales deben identificar el problema y después buscar una solución a partir de la realización de un programa.
En otras palabras, hay un programa entre una situación dada y una situación esperada. La situación dada es el problema o la necesidad que se identifica, y la situación esperada es aquella que los profesionales desean una vez llevado a cabo el programa.

- PROYECTO: e refiere a una intervención concreta, individualizada, para hacer realidad algunas de las acciones contempladas en el nivel anterior (el nivel táctico). Define resultados previstos y procesos para conseguirlos, así como el uso concreto de los recursos disponibles.

Este es el nivel operativo del proceso de planificación, por lo que no debe ser algo teórico, sino una actividad práctica y útil de cara a la intervención

Existen 3 tipos de proyectos:

1. Preventivos, que se encargan de la sensibilización y de evitar distorsiones en conductas grupales.
2. Auxiliares, los cuales acompañan desarrollos de un procedimiento educativo. Son proyectos de apoyo, para adquirir conocimientos nuevos.
3. Terapéuticos, que se encargan de la resocialización.

En cuanto a las fases del curriculum son 4: 

1. Fase previa o de diagnóstico: en ella se definen los problemas y necesidades a resolver mediante el programa. Se lleva a cabo una orientación de la planificación. Y también se definen los grupos a los que va a ir destinado el programa.

En cuanto a las necesidades educativas podemos decir que son de dos tipos: percibidas (manifestadas o no manifestadas) o no percibidas. Para detectarlas se necesitan una serie de instrumentos. Y se hacen un análisis de necesidades contrastando las percibidas con las no percibidas.

2. Fase de planificación o elaboración del diseño curricular: en esta fase se definen los distintos tipos de objetivos que se quieren alcanzar con el programa. Una de las EPD se utilizó exclusivamente para la explicación de los diferentes tipos de objetivos que vamos a nombrar ahora:
- Objetivos generales: definen el fin global de la intervención. Son generales, por lo que no se especifica ninguna tarea concreta. Dirige y orienta el proceso de enseñanza-aprendizaje al logro de los resultados finales.
- Objetivos específicos: determinan las habilidades, actitudes y conocimientos que el grupo destinatario debe adquirir tras la intervención. Especifican las intenciones recogidas en los generales.
- Objetivos operativos: nos muestra la conducta observable que queremos que nuestros destinatarios adquiera una vez conseguidos determinadas habilidades, actitudes…

Además de los objetivos, en esta fase se estructuran los contenidos, metodologías y actividades del programa. Los contenidos son un conjunto de saberes, información… que el destinatario debe aprender, es lo que se transmite para que de una situación dada se pase una situación esperada.

3. Fase de aplicación o gestión del diseño.

4. Fase de evaluación del curriculum, la cual explicaremos más adelante. 

Nuestro proyecto va destinado a un grupo de 9 alumnos que presentan Necesidades Especiales de Apoyo Educativo. En estos alumnos se detectan necesidades, carencias o déficit en el proceso de enseñanza-aprendizaje, que les imposibilita llevar el ritmo normalizado de su grupo de clase.

Los objetivos generales que nos marcamos son los siguientes:
- Mejorar y afianzar el desarrollo personal y la participación autónoma del alumnado.
- Potenciar las capacidades que permitan un fluido nivel de comunicación verbal y no verbal (oral y escrita).
A partir de estos objetivos generales, hemos diseñado una serie de objetivos específicos y operativos, los cuales determinan las habilidades, actitudes y conocimientos que el grupo debe adquirir tras la intervención.

Un ejemplo de objetivos específicos son:
- Ser autónomo en las actividades cotidianas y en las relaciones de grupo.
- Apreciar la importancia de los valores básicos que rigen la vida y la convivencia humana, y actuar de acuerdo con ellos.

Y, un ejemplo de objetivos operativos serían los siguientes:
- Organizar y gestionar su tiempo en función de las tareas escolares.
- Interiorizar y exteriorizar los valores sociales que intervienen en su acción cotidiana.

Los contenidos de esta programación se distribuirán en 9 unidades didácticas, teniendo una duración mensual cada una de ellas, ya que la programación está organizada para un curso escolar.

En cuanto a la metodología de la programación, las estrategias deberían ser:
- Individualizadas y contextualizadas, atendiendo a las necesidades de cada uno de los alumnos y su contexto.
- Activas, participativas y directivas, es decir, se creará una interacción activa con la profesora y asegurará la participación de los alumnos en el proceso enseñanza-aprendizaje.
- Significativas y globalizadoras, lo que significa aplicar lo aprendido a otros contextos y a diferentes ámbitos del desarrollo.
- Concretas y funcionales, para facilitar la compresión.

Tela de araña

La tela de araña es una dinámica de grupo que puede llevarse a cabo tanto para la presentación e integración a un grupo, o, como en nuestro caso, también puede servir de conocimiento.

¿De qué trata esta dinámica?

Pues el grupo que participa en el juego hace un círculo y uno de los integrantes tiene un ovillo de lana sujetando un trozo de lana, el cual lanza a uno de sus compañeros junto con una pregunta y ésta deberá ser respondida por tal compañero. Éste realizará la misma operación, es decir, una vez haya respondido la pregunta que le lanzaron, deberá hacer lo mismo con otro de los integrantes.
Cuando ya todos hayan recibido un trozo de lana, ésta formará un entramado parecido a una tela de araña, de ahí su nombre.

Como he dicho anteriormente, en nuestro caso, hicimos esta dinámica utilizando los conocimientos que hemos adquirido durante todos estos meses en la asignatura de Didáctica, ya sea de contenido teórico, del proyecto de cada grupo…

 Pienso que fue una actividad que le sirvió a Almudena para saber en qué punto nos habíamos quedado en cuanto a la asignatura y para asegurarse de que el camino por el que vamos es el correcto, ya que la mayoría de las preguntas fueron respondidas correctamente por parte de los alumnos, lo que quiere decir que, a pesar de ser una asignatura que no se evalúa a partir de un examen, los alumnos tenían bastante claro los conceptos explicados durante las clases. Una razón de esto puede ser que la constancia (o relativa constancia) que estamos teniendo con el blog y la necesidad de saber más y de buscar información sobre lo que Almudena nos explica, nos ayuda a afianzar los conocimientos.

En cuanto al contenido de la dinámica, ya los hemos comentado anteriormente. Son todas y cada una de las preguntas y respuestas que se llevaron a cabo durante la práctica.

Los recursos de la dinámica se puede decir que fuimos nosotros mismos, ya que no nos hizo falta nada más para poder resolver bien las cuestiones.

Una vez finalizada la dinámica, cada uno de los miembros del grupo exteriorizó lo que pensaba acerca del transcurso de la asignatura en general.

Mi conclusión se corresponde con lo explicado anteriormente. Al menos a mí me sirvió para darme cuenta de que sí que estoy avanzando en Didáctica, a pesar de que tenía dudas sobre si me estaba sirviendo o no, es decir, pienso que ha sido una práctica que ha hecho que tenga más confianza en mi capacidad de aprendizaje.
Creo que todos hemos aprendido bastante tanto de la asignatura como de la profesora, la cual tiene mucho que ver en que nosotros vayamos progresando, ya que la motivación que nos da nos sirve para no tirar la toalla con ninguna de las asignaturas y para seguir creyendo que DIDÁCTICA ESTÁ EN TODAS PARTES.
Además, la metodología de la asignatura, al ser diferente, ha hecho que tengamos un ritmo diferente de trabajo, quizás mejor, al no tener una presión (por los exámenes) y al poder trabajar libremente la asignatura, “sin preocuparse” de los errores que puedas cometer, ya que la evaluación no se hará a partir de que lo hayas hecho mal, sino que cuenta más la evolución a lo largo de estos meses.